Algunos vestigios de luz se advierten a veces
como los restos de una estrella muerta,
de la que seguimos viendo su cuerpo azul
en el tiempo
La distancia que te separa
de la boca del deseo
es el sello
del espacio que se confirma en tu cuerpo,
y desear con la falta
hace que lo real
no sea lo que existe sino lo que más extrañamos
Cuando se empiezan a habitar los vacíos,
cuando los huecos penetran el paisaje
hasta dominar la escena
la verdad que domina tu mundo
es la plenitud de ese vacío,
y donde el último rasgo de cordura
puede parecerte un abismo
No se puede inventar el desierto con el recuerdo de la arena
El sólo desliz de una caricia en el vacío de las dunas
te obligará a mirar el sol de frente
y todo aquello por lo que dolemos
dibuja las distancias mudas
que seguirán mordiéndote el recuerdo
como una herida abierta
Cual es la salida?
Cada minuto.
Cualquiera de ellos que te enseña
la puerta abierta a la tormenta
Y ese viento, feroz
que te atraviesa